A pesar de una cierta estabilización de la inflación, la conducción de la Asociación Bancaria (AB) sigue negociando aumentos en forma mensual, una modalidad que le permite sostener tanto el poder adquisitivo como la relación con las cámaras empresariales, tanto privadas como públicas.
De hecho, en lo que va del año, el gremio no realizó protestas por cuestiones salariales, sino por despidos o el cierre de sucursales, entre otros conflictos. En paralelo, a pesar de ser uno de los sectores ganadores del modelo de Javier Milei, el secretario General de La Bancaria, Sergio Palazzo, se ha convertido en un referente del sindicalismo combativo, criticando el plan del gobierno.
Bancarios: en los próximos días, nueva mejora salarial en forma automática
Una vez que se conozca el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de noviembre, se aplicará la diferencia y el sueldo de los trabajadores y trabajadoras bancarias tendrá una actualización que repercutirá en el valor del Día del Bancario, que ya se abonó el 6 de noviembre.
La última mejora fue del 2,7 por ciento, con un acumulado hasta el momento del 107 por ciento. La paritaria de este sector es por año calendario, es decir, de enero a diciembre, por lo que recién el enero (conociendo la inflación de diciembre) quedará definitivamente cerrada. La suba además impactará en el Día del Bancario, que se pagó el 6 de noviembre.
Históricamente, las partes acordaban un porcentaje a cuenta de incremento para el primer trimestre del año para reunirse en marzo, cuando fijaban el aumento definitivo. La escalada inflacionaria de los dos últimos gobiernos provocó que las discusiones salariales ya no se hagan en forma anual, sino a consideración de los sindicatos y sus respectivas cámaras.
Bancarios: cómo quedó el sueldo básico y de cuánto es el aguinaldo
En el caso de La Bancaria, durante todo este año los aumentos fueron mensuales y se aplicaron en forma automática. Con el aumento del 2,7 por ciento, el salario conformado quedó en 1.566.761,98 de pesos, con un básico de 1.492.602,84 a lo que se suman 74.159,14 pesos por Participación Ganancias (ROE).
Haciendo un estimativo, los bancarios y bancarias percibirán en este mes un sueldo de 1.600.000 más unos 800.000 pesos en concepto de sueldo anual complementario (SAC). Esas cifras son las de un empleado que ingresa en la actividad, sin otros adicionales como presentismo o antigüedad. Vale aclarar que, con cada acuerdo, también se actualizan los adicionales convencionales y no convencionales.
El gremio confirmó que hasta febrero continuará la cláusula de actualización automática por inflación oficial y en la segunda quincena de marzo se reunirán con los representantes de las entidades financieras tanto públicas como privadas para negociar otras actualizaciones y definir si continuar o no con esta forma de ajuste.
La Bancaria, en defensa de los jubilados por la quita de medicamentos
Por otra parte, La Bancaria cuestionó la decisión del gobierno de restringir el acceso a medicamentos gratuitos para jubilados y pensionados. Según el nuevo esquema del PAMI, sólo quienes ganen menos de $388.500 mensuales podrán acceder al beneficio, pero deberán completar un trámite de inscripción que obstaculiza el acceso. La medida del gobierno fue calificada por el gremio como «inhumana», ya que «impactará a más de 2.500.000 de personas que perderán la cobertura total, mientras que 3.300.000 deberán validar su condición de indigencia para mantener el beneficio».
Manifestó que este recorte se suma a una serie de decisiones que» han afectado gravemente el poder adquisitivo de los jubilados«, detallando: «El veto presidencial a la ley que actualizaba los haberes jubilatorios, el congelamiento del bono de 70.000 pesos desde marzo, y el incremento del precio de los medicamentos en un 284,5 por ciento, frente a un aumento de solo el 159,4 por ciento en la jubilación mínima.
En un comunicado, reafirmó que «los jubilados/as no deben pagar el ajuste fiscal. El Estado tiene la obligación de garantizar no solo jubilaciones dignas, sino las condiciones mínimas de supervivencia» y agregó que «el deseado ‘déficit cero’ que persigue este gobierno recae, una vez más, sobre los jubilados y la clase trabajadora».
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