En diálogo con Canal E, el economista Iván Cachanosky desmenuzó la propuesta oficial que busca movilizar los dólares en manos de particulares sin que se considere un blanqueo formal.
¿Cuántos dólares hay realmente fuera del sistema?
Aunque se estima que hay hasta 18.000 millones de dólares fuera del circuito formal, el economista fue cauto: “Es una cifra difícil, nadie sabe bien cuántos hay”, aclaró. Según explicó, la mayoría de esos fondos proviene del mercado informal, lo que complica cualquier cálculo certero.
El entrevistado recordó que durante el último blanqueo, quienes podían justificar hasta 100.000 dólares lo hicieron sin costo, por lo que “hay que ver cuántas personas quedan con dólares afuera”. Esa duda, sostuvo, limita el potencial de éxito de la medida actual.
¿Por qué no se trata de un blanqueo?
Cachanosky marcó una diferencia clave con los procesos de blanqueo anteriores: “Esto no es un blanqueo, sacar del colchón no implica que te reconozcan legalmente esos dólares”. A diferencia de las declaraciones juradas exigidas en el blanqueo formal, ahora no habrá registro oficial que respalde el crecimiento patrimonial.
“No está esta formalidad que te dice ‘estos dólares te los reconozco”, insistió, lo cual genera incertidumbre jurídica para quienes temen futuras modificaciones normativas. Esta falta de garantías puede ser una barrera para que quienes poseen dólares fuera del sistema decidan ingresarlos al circuito económico.
El verdadero objetivo: reactivar el consumo
Para Cachanosky, la medida apunta más a dinamizar el consumo que a regularizar fondos. “Si las personas lo empiezan a usar para consumo, empieza a repuntar una variable que tiene preocupada al gobierno”, dijo. El Ejecutivo busca que estos fondos, aun sin formalización, se vuelquen al mercado interno.
En este contexto, el especialista explicó: “Es una manera de intentar implementar esa plata”, especialmente en una economía donde el salario real empieza a mejorar pero el consumo aún no despega al ritmo esperado.
¿Puede cambiar la confianza de los ahorristas?
Respecto a la disposición de los pequeños y medianos ahorristas para confiar en esta iniciativa, el economista reconoció que “muchos sacaron los dólares del sistema por desconfianza”, ya sea por imposibilidad de acceder al mercado oficial o como resguardo ante la inestabilidad local.
Sin embargo, hay señales de cambio. “El gobierno está tratando de cambiar eso”, explicó, señalando que con nuevas herramientas como la emisión de bonos y la intervención en el mercado de dólar futuro, “tratan de transmitir que el dólar va a estar tranquilo mucho tiempo”.
¿Quiénes podrían sumarse a esta propuesta?
La medida parece estar pensada más para pequeños ahorristas que para grandes tenedores de capital. “Apuntan más a Doña Rosa que a los que tienen muchos dólares”, comentó Cachanosky. El éxito dependerá de si las personas creen en la estabilidad cambiaria prometida.
“Hay mucha gente que le cree al gobierno”, afirmó, aludiendo a encuestas informales y conversaciones cotidianas. Según contó, “muchos me dicen que ya no ahorran en dólares, que ahorran en pesos”, algo que considera una señal incipiente de cambio en la percepción económica.